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El centro de acopio Asociación Simón Rodríguez nunca cerró sus puertas a los pequeños productores de leche de San Agustín del Callo; en los meses más críticos para la población cuando el 90% de las familias salió del lugar por la actividad del volcán Cotopaxi, el centro de acopio recibía la leche de quienes se quedaron.
Su producciónnormal era de 1.700 litros y en la temporada de emergencia bajó a 450 litros diarios.
A un año de lo sucedido, las actividades vuelven a la normalidad y a diario se reciben los 1.700 litros de leche. Algunos habitantes del lugar tuvieorn que endeudarse para recuperar parte de su ganado ya que esa es su principal actividad económica. Blanca Llano es una mujer de 53 años que vive con su esposo de la agricultura y aganadería, esta mujer nunca abandonó su vivienda, a diario entrega un aproximado de 24 litros de leche, en el centro de acopio pagan 39 centavos por litro. Al mes percibe entre 200 y 300 dólares.
En la mañana y en la tarde el centro de acopio abre sus puertas para recibr la leche de los habitantes del lugar, algunos llegan caminando, otros en moto y en carro.
Olmedo Caiza se encarga de recibir la leche, contó que durante la emergencia la entrega fue mínima sin embargo el centro de acopio nunca cerró.
Destacó que ahora lo que buscan es implementar un proyecto para darle el valor agregado al producto pero requiere los permisos necesarios para poder elaborar quesos y yogurt. Además esperan que las autoridades les ayuden para conseguir una empresa grande que compre la lehe, actualmente una sola empresa que trabaja en las cercanías del lugar les compra la leche.
“La situación económica de la seguridad no ha mejorado, al contrario la forma de vida de nosotros no ha cambiado, seguimos igual o peor que antes”, añadió.
Añadió que aunque no tiene mayores beneficios y a pesar de la situación por la que atravesaron en este año, el centro de acopio ha debido cumpir con todas las exigencias para su funcionamiento, sin flexibilidad alguna.
Destacó que esperan el apoyo de las autoridades para recibir capacitación y poder obtener el registro sanitario que les permita elaborar productos lácteos y poder obtener mayores recursos ya que tienen la prediposición para trabajar.
Fuente: La Hora | ElProductor.com
