La pesca representa una de las actividades más importantes para la economía nacional. En este sentido, el sector pesquero artesanal busca que le arrastre la misma marea alta que conduce a la pesca industrial hacia el crecimiento y la búsqueda de certificados de calidad.

Por eso, el gremio y las autoridades pesqueras se reúnen desde ayer para conocer y adoptar nuevas normas que reorganicen la actividad y mejoren sus cifras y condiciones de trabajo. El objetivo que buscan, en conjunto, los miembros de la Federación Nacional de Cooperativas Pesqueras del Ecuador (Fenacopec) con el Ministerio de Agricultura y Pesca (Magap), es elaborar un proyecto de ley que recoja las directrices voluntarias internacionales, aprobadas en Roma el año pasado, para la sostenibilidad de la pesca en pequeña escala.

Jorge Samaniego, representante de la FAO, Organización de Naciones Unidas para Alimentación y Agricultura, que también acudió a la cita, indica que se están realizando trabajos con el Estado, pero también se necesita el compromiso de los pescadores.

“Actualmente la FAO, ya trabaja con el Viceministerio de Acuacultura y Pesca en el valor agregado de la pesca artesanal, como empaques y cadenas de frío, además de subproductos como las pulpas de cangrejo y conchas enlatadas. Otros proyectos se llevan realizando con el Ministerio del Ambiente y Conservación Internacional, para manejar los espacios marino-costeros y para tener un manejo responsable de las áreas protegidas”.

En el comercio internacional, Samaniego explica que “hay consumidores exigentes preocupados por la sostenibilidad y estas directrices sirven para planificar mejor y evitar que el recurso pesquero esté en riesgo”.

Estas buenas prácticas incluyen un seguro para pescadores, una regulación pertinente para que se respeten los espacios de pesca artesanal, ya que es un reclamo tradicional del sector la invasión de barcos chinchorreras al interior de los límites que absorben buena parte de las capturas.

Estas medidas ayudarán a un sector que este año, según denuncia, ha perdido unos $ 5 millones por embarcaciones desaparecidas y por el impacto del cambio climático en los recursos marinos. Sin olvidar los períodos de veda, como la actual del dorado hasta octubre, que reducen su capacidad productiva.

Gabriela Cruz, presidenta de Fenacopec, explicó además a EXPRESO que en la ley de pesca actual no se encuentran totalmente reflejados. “Es una lucha perenne con esa ley caduca. Queremos que en un nuevo proyecto sean considerados ciertos pasos fundamentales”, se lamentó.

 

Fuente: Expreso | ElProductor.com

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