La eliminación de algunos requisitos para obtener créditos, la baja tasa de interés y la rapidez con que estos se entregan cautivó a los productores de la Sierra Central para solicitar préstamos en BanEcuador.
Sonia Lloay, de la comunidad La Rabija, en la parroquia García Moreno, de la provincia de Tungurahua, obtuvo su préstamo al 11% de interés anual, frente al 18% y 20% que le ofrecieron en la banca privada.
“Está bueno, porque en el campo no se puede sacar productos para vender y pagar el préstamo a lo que piden las cooperativas”, dijo Lloay. Con el dinero que ella obtuvo compró plantas de tomate, semillas de maíz, insumos y fertilizantes.
BanEcuador E.P eliminó dos requisitos de los siete que antes debían cumplir los interesados: ya no se piden certificados bancarios ni papeles notarizados, explicó Patricio Males, responsable de Financiamiento Productivo de la Zona 3.
“Simplemente con el certificado del predio y los requisitos que uno se tiene a mano, el crédito se demoró ocho días”, precisó Margarita Villa, quien reside en la colonia Bolívar, provincia de Pastaza y accedió a un crédito de 8.000 dólares en julio pasado. Con ese dinero compró vacas y un toro reproductor, que ahora son su sustento económico.
BanEcuador E.P entrega créditos adaptados a las condiciones de los sectores productivos y con horarios adecuados a las actividades de los campesinos, comerciantes y productores.
Entre enero y septiembre, BanEcuador entregó 2 millones 350 mil 989 dólares a los campesinos de las cuatro provincias (Chimborazo, Cotopaxi, Tungurahua y Pastaza) que conforman la Zona 3 del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (MAGAP).
Del total, los productores de Cotopaxi y Chimborazo son quienes más préstamos solicitaron y recibieron. A la primera provincia se entregó 947.697 dólares, mientras que a Chimborazo 823.532 dólares.
Le sigue Tungurahua con 392.936 dólares desembolsados y Pastaza con 186.824 dólares. En esta última provincia los créditos fueron más para comunas.
Según Nancy Fernández, de San Vicente de Poaló, en Cotopaxi, los productores conocieron de la entrega de créditos a través de los técnicos del MAGAP que trabajan en el campo.
Nancy recibió sus 8.000 dólares a mediados de octubre. Cuenta que se endeudó para cinco años y su pago es semestral, ya que sus cosechan salen cada tres o cinco meses.
Fernández destinó el dinero a la construcción de un sistema de riego para cultivar sus brócolis, cebollas, papas, remolachas y papanabo.
“Es positiva la ayuda, no solo con el crédito, sino que nos ayudan en la ganadería y en la agricultura, con asesoramiento”, insistió Fernández.