La comercialización de los cultivos de ciclo corto siempre ha sido el cuello de botella de los productores en los primeros meses del año.
Gran parte del hectareaje de arroz y maíz está en manos de pequeños agricultores y en zonas donde se depende de la lluvia y no hay más alternativas de cultivo, por lo que ellos se lanzan a sembrar sin un panorama seguro donde no conocen precios, ni costos de producción, solo saben que es la oportunidad de jugar esta lotería, donde no saben si se gana o se pierde.
Esta problemática motivó al PRODUCTOR. COM a entrevistar al gerente de la Unidad Nacional de Almacenamiento, UNA, Mao Lam, para conocer cómo se están preparando para la próxima cosecha.
¿Cuál será la Política de comercialización para la cosecha de maíz y arroz que se avecina?
Nuestra misión es regular mercados y corregir las distorsiones que pueda haber. Las distorsiones afectan a los más débiles en las cadenas de valor y generalmente los productores son los que tienen menor capacidad de negociación.
Entonces la Empresa Pública interviene cuando hay estas distorsiones de mercado por excedentes de producción que no se logran colocar adecuadamente en los mercados. El Ministerio de Agricultura tiene como política comercial definir precios mínimos de sustentación para estos tres productos (arroz, maíz y soya) con el fin de que el agricultor pueda cubrir sus costos, pagar préstamos y que le quede un margen para subsistir. Desde que la UNA ayuda en el proceso de comercialización, se ha logrado estabilidad, al igual que con los precios mínimos de sustentación. Como tal somos el brazo ejecutor de esta política y absorbemos las cosechas.
En este momento los agricultores están sembrando, pero se ha dado una actividad anormal de venta de arroz, aunque no son meses donde haya abundante cosecha, sin embargo, la inestabilidad del mercado en diciembre donde la industria del pilado se hace de inventarios para poder vender durante 4 meses de invierno y con eso atender al país, pero por algún motivo no han captado todo lo necesario y hemos tenido nosotros que intervenir en la compra de arroz pilado y en cáscara en enero y en lo que va de febrero.
¿A esto se debe la baja en el precio del arroz?
Evidentemente, cuando alguien no absorbe el excedente, el principio económico dice que hay un equilibrio entre oferta y demanda y que cuando la demanda es menor a la oferta, el precio baja, lo contrario cuando la oferta es menor a la demanda, el precio sube. En los últimos tres años, la oferta de arroz ha sido menor a la demanda y los precios han estado por encima del precio mínimo por lo que la UNA casi no compró arroz.
Lo sucedido ahora es por un rumor en la frontera sur de que estaba ingresando arroz peruano, pero esto lo tendrá que certificar la subsecretaria del Magap y la aduana. El mercado es un nervio que responde a todo tipo de rumores.
¿Qué se está haciendo para frenar el contrabando?
Sabemos que lo que ha hecho el Magap es aumentar los controles e implementar un certificado de movilización de productos que es un Comprobante de Origen Nacional de Productos Agrícolas, (CONPA) administrado por la Subsecretaria de Comercialización. Sin este certificado no se puede movilizar por carretera ningún producto, ni arroz pilado, ni en cáscara.
¿La UNA, a cuánto está comprando el Arroz?
Estamos recibiendo actualmente arroz en cáscara en la planta de Daule y Babahoyo al precio mínimo de 35,50 la saca de 200 libras, 20% humedad y 5% impurezas.
Y para el arroz pilado hemos hecho tres segmentos de clientes, piladores que tienen accionistas o cuyos dueños son asociaciones de productores, a ellos hemos dado prioridad para este cupo. También está el grupo de piladores independientes y los agremiados que pertenecen a Corcom les estamos dando un cupo haciendo la transformación para que nos puedan vender este arroz pilado a $ 34 el grado 1 y 33,50 el grado dos, con ese precio la piladora mantiene un margen por el costo del servicio y puede seguir comprando a 35,50 el arroz en cáscara.
¿Qué pasará luego con todo este arroz comprado? Habrá cupo de almacenamiento para la próxima cosecha?
Este arroz es almacenado como reserva estratégica, arroz en cáscara en la Costa y pilado en la Sierra.
Si vamos a tener almacenamiento para el arroz en cáscara, esperamos que este problema coyuntural con el pilado no se presente más. Es evidente que va a haber bastante arroz en cáscara.
Tenemos capacidad de almacenamiento de arroz en cáscara para más de 20.000 ton y contamos con silos bolsa con capacidad mayor de esa. En silos bolsas solo necesitamos tener terreno y tenemos una capacidad de hasta 100.000 ton en bolsas pero la producción del país no es de esa cantidad, ni pilado, ni en cáscara en esta temporada, pero creemos que a mediados de febrero habremos salido de cosecha final de verano del 2016 y lo que queda es la siembra de invierno.
La reserva estratégica del país es de 40.000 ton de arroz pilado que equivale a 60.000 ton de arroz en cáscara, ya hemos comprado cerca de 100.000 quintales equivalente más o menos 4,500 ton de arroz pilado lo que no representa más del 12% así que tenemos cupo aunque llegue cosecha abundante. El consumo estimado del país es de 50.000 ton mes, la producción total del país es de 600.000 ton de arroz en cáscara durante las épocas de producción normal, pero este excedente es temporal se reabsorbe de nuevo en el mercado.
¿Con la intervención de ustedes en cuánto tiempo se normalizarán los precios del arroz?
Según La Corporación de Industriales arroceros, Corcom se cree que hasta mediados de febrero se termine la sensación de que hay excedentes momentáneos y de que hay contrabando y como la UNA también está comprando, todo volverá al ciclo normal.
¿Qué proyecto hay para que cambie este proceso que es igual todos los años?
Cada año es diferente y no hay una receta única porque en una cadena hay muchos actores y cuando algún actor cambia, se desestabiliza.
Lo que sí tenemos claro es cuales son las herramientas para poderlo afrontar, en este caso retirar excedentes de mercado para obligar que el precio suba, no funciona colocar un precio y obligar a pagar porque aumentamos el problema, pero ha funcionado retirar los excedentes del mercado.
Hay que controlar fronteras, pero mientras exista diferencia de precios siempre habrá contrabando aunque se controle.
Lo que los agricultores tienen que hacer es ser más eficientes y así lograr mejores precios y poder comercializar mejor, para poder competir con los vecinos.
Debemos lograr más productividad a menor costo para aprovechar las oportunidades de exportación.
El reto es ver como se reducen costos y lograr más productividad.
¿Con qué presupuesto cuenta la UNA para esta cosecha?
Tenemos previsto comprar 40.000 ton de arroz en cáscara y hasta 100.000 ton de maíz, es lo previsto, si es necesario buscar más veremos cómo hacerlo.
Más o menos son 40 millones de dólares.
¿Cuándo se conocerán los nuevos precios de arroz y maíz?
La subsecretaria de comercialización fijará los precios dos meses antes de que inicie la cosecha, en marzo se convocará a consejo consultivo y ahí se podrá saber según los costos de producción de los agricultores.
¿Qué posibilidades hay de exportación?
Hemos hecho una gestión que inicia desde la Subsecretaria de Comercialización del Magap con reuniones previas a las reunión del Presidente Rafael Correa y el Presidente Juan Manuel Santos para tratar algunos temas de las relaciones bilaterales con Colombia, como una continuación a la reunión que hubo hace dos años en Río Verde.
Uno de los puntos que Colombia no ha concretado de manera formal es la apertura completa y total para la exportación de arroz ecuatoriano, aduciendo algunos motivos entre ellos como que Ecuador puede ayudar a controlar el contrabando hacia allá, que los cupos que se liberen y se abran para que Colombia pueda importar libremente arroz ecuatoriano, que lo necesita, porque sigue siendo deficitario en esto, sea bajo un ambiente de control formal y que no afecte el tema comercial de ese país, al igual que Ecuador no quiere que el tema comercial con Perú lo afecte. Nosotros hemos propuesto que todas las exportaciones de arroz pilado sean a través de la UNA. Que sean por frontera, vía terrestre para que de esta manera exista un solo exportador y que el control sea total, asegurándole al Estado colombiano que no habrá contrabando ni triangulación de arroz. Hemos pedido un primer cupo de 20.000 ton que esperamos que el gobierno colombiano lo ratifique. Se han realizado conversaciones entre los ministros, cancilleres y el presidente anuncia que él seguirá insistiendo en el tema.
Con esto se podrá refrescar las reservas estratégicas de arroz que el país tiene y que la UNA administra y se logrará que al haber salido de arroz baje el nivel de especulación. Esperamos tener muy pronto respuesta y hacer una alianza público privada para que las piladoras continúen trabajando con nosotros para pilar y preparar los embarques. La UNA no lo hará sola, pero si controlará todo el proceso porque nosotros seremos los exportadores. Habrá varios proveedores de servicio, no nos interesa reemplazar al sector. Así dinamizaremos la actividad y esperamos aperturar nuevamente las relaciones con Colombia.
La aspiración es poder exportar 80.000 tn
Autora: Lcda. Marlene Bernal.