Después de su intervención ante el pleno de Asamblea General de Naciones Unidas, el Presidente Lenín Moreno firmó el Tratado sobre Prohibición de Armas Nucleares. Con este acto, Ecuador ratificó su compromiso con la paz y la seguridad mundial al librar al planeta de la amenaza atómica. También demostró la convicción del país en que el multilateralismo es el mecanismo idóneo para resolver los problemas que aquejan a la comunidad internacional.

El Tratado fue adoptado por la ONU el 6 de julio de 2017 y se constituye como un hito en el esfuerzo de la comunidad internacional por vivir en un mundo sin ese tipo de armamento de carácter altamente destructivo. Es la primera vez que un instrumento declara explícitamente como contrarios al derecho internacional la posesión, el uso o la amenaza de las armas nucleares.

En la misma ceremonia, el presidente Moreno realizó el depósito oficial de la ratificación ecuatoriana del Acuerdo de París contra el Cambio Climático y del Protocolo de Nagoya. Los dos instrumentos internacionales refuerzan la respuesta global frente al cambio climático e impulsan la participación justa y equitativa en los beneficios que se deriven de la utilización de los recursos genéticos.

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