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Los pequeños y medianos productores de leche de Carchi están demandando más precisiones sobre el acuerdo interministerial firmado semanas atrás, que intenta regular el sistema de comercialización.
Las dudas surgen debido a que la industria continuaría utilizando significativos volúmenes de suero en la producción de leche, mientras la comercialización en el sector rural se mantiene estancada.
Los resquemores también están relacionados con el desayuno escolar, propuesta que dicen estaría monopolizada por una sola empresa, que no estaría cumpliendo con los compromisos establecidos por este proyecto estatal, que aparentemente iba a favorecer a los productores carchenses con la compra del lácteo.
Alfredo Villarreal, productor de Tulcán, denunció que una de las empresas responsables de acopiar 30.000 litros de leche en la provincia, tras un acuerdo con el Gobierno Nacional, no ha cancelado los pagos a las asociaciones, algo que los tiene preocupados.
Los campesinos dicen que el alto uso del suero hace que se queden con el producto, razón por la que están demandando se cumplan los controles correspondientes por parte de los ministerios que suscribieron este acuerdo, especialmente la Arcsa.
El acuerdo debe ser socializado durante 30 días; sin embargo, Villarreal sostiene que hasta el momento no se ha brindado dicha información en ningún sector de la provincia de Carchi, como reza en el convenio.
Pero va más allá, al señalar que mientras a los grandes productores se les paga 0,50 centavos por litro, a los pequeños se les cancela de entre 0,25 y 0,35, argumentando que los compradores los relegan porque no cuentan con tanques fríos.
Juan Martínez, productor de 30 litros diarios, quien reside en la vía a Tufiño, manifiesta que son parte de una cadena de explotación a vista y paciencia de las autoridades, que no ejercen los operativos, pese a que cuentan con un catastro de las personas que recolectan el producto diariamente.
?Los campesinos dicen que el alto uso del suero hace que se queden con el producto.
Todos piden que se termine con la intermediación que no permite precios justos y que los pequeños lecheros sean los sacrificados en tiempos buenos o en épocas de crisis.
Manuel Rosero cree que las autoridades deben volver los ojos al campo y a la zona de frontera.
Para este mediano productor, el remedio (acuerdo) no debe ser peor que la enfermedad y las representantes de los diferentes ministerios acatar las resoluciones y efectuar los operativos de control.
El pasado 12 de abril, el prefecto Guillermo Herrera, en la reunión que mantuvo la Mancomunidad del Norte con el ministro Rubén Flores, habría solicitado socializar en territorio el alcance de la nueva normativa del reglamento de control y regulación de la cadena de producción de leche.
