La organización austriaca de protección de plantas ha informado recientemente a la secretaría de la Organización Europea y Mediterránea para la Protección de Plantas (OEPP) de la primera detección del virus rugoso del tomate en su territorio. El virus se ha detectado en un invernadero de tomate a finales de junio en la localidad de Münchendorf (Baja Austria).
Los síntomas (hojas estrechas alargadas con un ligero patrón de mosaico y rugosidad ocasional) se han observado, pero sin signos de gravedad. Se han tomado medidas de erradicación que incluyen la destrucción de todas las plantas, frutos y medios de cultivo (lana de roca), así como una limpieza y desinfección concienzuda de contenedores, almacenes, dispositivos, máquinas, vehículos y otros objetos.
También se ha confirmado la presencia de ToBRFV en una plantación de Thurgau, en Suiza. En el cantón de Thurgau, el virus se ha detectado en tomates. En Suiza, el virus jordano está clasificado como una plaga potencialmente cuarentenaria y está vigilada por los servicios de protección fitosanitaria del cantón. Las plantaciones de tomates y pimientos picantes están obligadas a informar de sospechas de casos a las autoridades de forma inmediata.
Junto con la Oficina Agrícola de Thurgau, la Oficina Federal Suiza de Agricultura y Acroscope, el servicio de protección fitosanitaria del cantón ha tomado medidas para controlar y vigilar el brote. El objetivo es evitar la propagación del virus.