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Pamela se debilitó la tarde del martes a tormenta tropical en aguas del océano Pacífico, pero recobraría fuerza antes de impactar el miércoles la costa oeste de México como un huracán, informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC).
A las 21.00 GMT, la tormenta se localizaba a 385 kilómetros al suroeste del puerto turístico Mazatlán y registraba vientos máximos sostenidos de 110 kilómetros por hora (km/h), con rachas más fuertes, mientras avanzaba a hacia el norte a 15 km/h.
Más temprano, el NHC informó que, antes de tocar tierra en el estado de Sinaloa, Pamela alcanzaría la fuerza de un «huracán mayor», es decir, alcanzará vientos de más de 177 km/h.
«Se espera que Pamela vuelva a convertirse en huracán antes de que llegue a la costa del centro-oeste de México el miércoles en la mañana», aseguró el NHC en su reporte más reciente.
La tormenta se desplazaba el martes cerca del extremo sur de la Península de Baja California, donde se localizan importantes centros turísticos como Los Cabos.
Sinaloa, donde Pamela golpeará con mayor fuerza, es el mayor productor nacional de maíz y uno de los principales de tomates y frutas que ocupan un lugar destacado en las exportaciones hacia Estados Unidos.
«Como consecuencia de las lluvias podrían incrementarse los caudales de ríos y arroyos, así como generarse inundaciones en las zonas bajas (en la región) con posibilidad de deslizamientos de terreno y afectaciones en caminos y tramos de carreteras», dijo la Comisión Nacional del Agua de México (Conagua).
