Varios operadores, por temor a que el producto no se mantenga hasta la primavera, han comenzado a vender y reducir las existencias.
Las papas italianas están siendo muy apreciadas en el mercado. Sin embargo, la falta de disponibilidad, acompañada de problemas de conservación, da mucho espacio para el producto extranjero, según lo manifestado por el experto en comercio Matteo Zanarini.
“Los precios son muy buenos, tanto para el producto nacional como para el importado. El rango de precios es muy variable: hace unos días, el producto de calidad italiano se pagó hasta 38 centavos/kg. El hecho de que el CIPC se ha prohibido, ha causado algunos problemas de conservación”.
Varios operadores, por temor a que el producto no se mantenga hasta la primavera, han comenzado a vender y reducir las existencias. A los minoristas a gran escala les gustaría los mismos precios que en septiembre, pero esto no siempre es posible, precisamente porque las existencias están disminuyendo.
“El producto de calidad extranjera también es muy apreciado. En los últimos días ha habido una ligera disminución, pero todavía estamos hablando de comenzar con 18-21 centavos, hasta 28-32 centavos para un producto lavable. Egipto ha anunciado la llegada dentro de 10 días de las papas de segunda cosecha”.
“Todos los operadores, concluye Zanarini, temen por la resistencia del producto, debido a la falta de productos eficaces contra el brote. De ahora en adelante será como jugar al ajedrez. Sin embargo, creo que es necesario un circuito de información global con noticias confiables, para dar a los operadores de la cadena de suministro la oportunidad de organizarse a tiempo para enfrentar las dificultades”.
