Los bananos mantienen su posición como producto básico en prácticamente cualquier lineal de frutas y hortalizas del mundo, y mientras tanto, los líderes mundiales en la exportación de esta fruta, especialmente Ecuador, están haciendo un esfuerzo significativo para garantizar la seguridad de su gente y sus productos.
Según José Antonio Hidalgo, director ejecutivo de la Asociación de Exportadores de Banano del Ecuador (AEBE), a pesar de registrarse un crecimiento en las exportaciones este año (2023), todavía no se han alcanzado los niveles precovid.
“Estamos registrando un mayor volumen de exportación, y esto beneficia también a otros sectores ligados a la cadena de valor del banano. Entre enero y octubre de este año (2023) se ha logrado un aumento del 6,36% en el volumen exportado, en comparación con el mismo período en 2022, aunque todavía estamos por debajo del volumen que enviábamos hace tres años, cuando se superaron los 380 millones de cajas exportadas”, afirma Hidalgo.
Debido a la precaria situación de Ecuador en materia de seguridad, AEBE, como organización que representa a la industria, ha invertido en una serie de iniciativas para garantizar la seguridad en general, no solo de los trabajadores del sector del banano, sino también de la reputación del país.
“La seguridad es importante para el sector, ya que puede afectar al estado de ánimo de trabajadores, productores o exportadores, así como a la propia reputación de la industria, que se ve afectada por los envíos de bananos que llegan contaminados, especialmente si su destino son los Estados Unidos o la Unión Europea, mercados que representan el 40% de las exportaciones semanales.
Esto tiene su impacto en los costos de producción y exportación y en la competitividad. El sector invierte 200 $ por contenedor, un valor que no se transfiere al comprador. Es una situación que nos hace víctimas. Por esta razón, continuaremos coordinando esfuerzos con las agencias de seguridad pública para poner fin a esta situación”, explica Antonio Hidalgo.
Preocupan los retrasos en el canal de Panamá
Dada su condición de mercancía perecedera, los bananos pueden verse afectados por los actuales retrasos en el canal de Panamá, y esto, según Hidalgo, tendría un impacto negativo en su competitividad en términos de precio, días de tránsito, plazos de envío o calidad de la fruta.
El primer trimestre de 2024 estará marcado básicamente por factores logísticos relacionados con el clima. “Alrededor del 82% de nuestros bananos tienen que pasar obligatoriamente por el canal de Panamá. Ecuador es el noveno mayor usuario de esta vía fluvial, con una participación del 4,9% durante el último año.
La sequía en el área del canal y el consiguiente anuncio de la autoridad de que se aplicarán nuevas restricciones al tráfico ha tenido ya una consecuencia. Tres de las cuatro principales compañías navieras que transportan bananos en Ecuador: MSC, CMA CGM y Hapag Lloyd, han anunciado que impondrán un recargo por cada contenedor que pase por el canal.
MSC lleva aplicándolo desde el 15 de diciembre, mientras que CMA CGM y Hapag Loyd lo harán a partir del 1 de enero de 2024. Otras compañías navieras, como Sea Trade, están estudiando la posibilidad de utilizar el estrecho de Magallanes como ruta alternativa, argumentando que el costo de pasar por él es muy similar al de pasar por el canal”.
Para la AEBE, es destacable su participación en la negociación de tratados de libre comercio con China y Corea del Sur. La sostenibilidad social es otro aspecto clave.
“Un informe sobre ‘Salarios de los trabajadores de plantaciones de banano ecuatoriano vinculados al mercado alemán’, coordinado por el Grupo de Trabajo de Supermercados Alemanes compuesto por Aldi Süd, Aldi Nörd, Dm, Kaufland y Rewe, reveló que el 99,36% de los trabajadores involucrados en el análisis recibieron un salario digno. Esto demostró el compromiso del sector con el pago de un salario digno, que se estableció por ley en 2010”, concluye Antonio Hidalgo.
