Con el objetivo de asegurar que la cebolla roja y blanca que ingresa al país desde Perú y Ecuador cumpla con las normas sanitarias y legales, el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), en articulación con la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) y la Policía Fiscal y Aduanera (POLFA), intensificó los controles fronterizos durante 2025.
La medida busca no solo proteger la sanidad agropecuaria del país, sino también garantizar condiciones justas para los productores nacionales, especialmente en regiones como Boyacá, Cundinamarca, Norte de Santander y Nariño, donde la producción de cebolla representa una fuente clave de ingresos y desarrollo rural.
Control estricto para evitar plagas y comercio ilegal
Durante este año, el ICA ha incautado más de 500 kilogramos de semilla de cebolla bulbo en la frontera colombo-ecuatoriana, además de 250 kilogramos de flores y frutales que pretendían ser ingresados al país de forma ilegal, principalmente por el peaje El Placer, uno de los principales puntos de tránsito hacia ciudades como Medellín, Bogotá, Cali, Barranquilla y Bucaramanga.
Los procedimientos de control incluyen:
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Descarga de la mercancía.
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Revisión exhaustiva de la plataforma del vehículo.
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Inspección de la cebolla en zaranda.
Este protocolo permite detectar cualquier rastro de tierra, raíces o presencia de plagas que puedan representar una amenaza fitosanitaria para el país. En especial, se ha reforzado la revisión de cebolla roja importada desde Perú, para verificar que cumpla con los requisitos de ingreso: libre de plagas, limpia y lista para el consumo humano.
Un trabajo articulado por la sanidad y la economía rural
Este esfuerzo interinstitucional se enmarca en un modelo de vigilancia que busca mantener los altos estándares sanitarios del país, reconocidos recientemente por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), que otorgó a Colombia siete certificaciones sanitarias. Dichos logros son el resultado del trabajo conjunto entre las entidades y los productores agropecuarios de todos los tamaños.“El compromiso es garantizar que ningún producto agropecuario entre de manera ilegal, afecte la sanidad del país o ponga en riesgo los cultivos de nuestras regiones. Este trabajo articulado con DIAN y POLFA es clave para proteger tanto la salud vegetal como la economía de nuestros campesinos”, destacó el ICA en un comunicado oficial.
Compromiso permanente en 2025
Las autoridades han reiterado que los controles continuarán de manera constante durante los 210 días restantes del año, como parte de la estrategia nacional para asegurar alimentos sanos, legales y de calidad, en beneficio de todos los colombianos y del fortalecimiento del sector agropecuario.
https://www.ica.gov.co/noticias/ica-cebolla-frontera-rumichaca
