El canal de Panamá informó hoy cargos adicionales a los barcos por uso de agua dulce y la reducción de los tránsitos diarios reservados de 32 a 27 naves, como consecuencia de la sequía.
Ricaurte Vázquez, administrador de la vía interoceánica, hizo el anuncio en conferencia de prensa, donde analizó que el funcionamiento de las esclusas requiere de altos volúmenes del líquido en relación a su tamaño, independiente de las dimensiones del buque y los contrastó con la disponibilidad de los embalses.
El monto extra estaría entre uno y 10 por ciento del peaje a pagar por cada embarcación y será inversamente proporcional al nivel del Lago Gatún; se establecerá a partir del 15 de febrero próximo, como medida extrema para garantizar la confiabilidad de las operaciones, ante el drástico cambio en el régimen de lluvias.
Se incluirá adicionalmente una tasa fija de diez mil dólares para los buques de más de 91 pies de ancho (27,7metros), al tiempo que revisarán el sistema de reservaciones en un escalonamiento de naves por su tamaño, mientras ofrecerá posibilidades para los barcos que optan por la lista de espera.
Según estadísticas del canal, 2019 fue el quinto más seco de los últimos 70 años en su cuenca hidrográfica, lo que provocó que el nivel de su principal repositorio que es el Gatún, enfrentó la actual temporada seca con más de un metro por debajo de su cota histórica, a lo que se suma el incremento de la evaporación por altas temperaturas.
Por cada tránsito se utilizan un promedio de 196 millones 840 mil litros de agua, que se van al mar y el desafío es lograr la reutilización de ese recurso principalmente cuando las precipitaciones se redujeron en una quinta parte en el año que concluyó.
Otras acciones emergentes para el uso racional del agua, son el intercambio lateral en el llenado de las cámaras de los dos juegos de las esclusas tradicionales, lo que permite inundar la de más baja altura con el vaciado de la más alta; además, en la ampliación se emplean las tinas de reciclaje diseñadas para el ahorro de agua.
Sobre soluciones a más largo plazo, Vásquez explicó que se estudia trasvasar al canal de una fuente diferente, aunque también analizan otras técnicas y proyectos, dentro de las cuales en otra ocasión anterior mencionó agua de mar desalinizada.
Recientemente, el administrador reveló al Sistema de Noticias Internacional de Panamá que, entre las alternativas para suministrar agua a las operaciones, ante los bajos niveles de las fuentes actuales, está adquirir las acciones y control del lago Bayano (al este de la ruta), cuyo uso es exclusivo para generar electricidad y la pesca.
En posición opuesta a la del anterior presidente del país, Juan Carlos Varela, que pretendía privatizar la parte pública del embalse, el administrador de la ruta interoceánica apoya el criterio que el Estado, en tanto co-dueño, podría comprar la parte de la transnacional estadounidense que explota Bayano, negociaciones que se adelantan, reveló Vázquez.
