La industria avícola en Ecuador ha experimentado un notorio crecimiento, siendo el pavo una estrella culinaria durante las festividades con una participación del 95%. Según ABC Avícola, la producción nacional no solo satisface, sino que supera en un 30% la demanda habitual, lo que subraya la importancia de una cadena de suministro robusta.
En este contexto, BASF Ecuador, desde la industria química, desempeña un papel crucial al proporcionar soluciones nutricionales específicas para asegurar la calidad y salud de las aves. Diego Remolina, experto en nutrición animal de BASF, destaca la relevancia de las vitaminas, enzimas y minerales orgánicos en este proceso. Estos elementos no solo contribuyen al crecimiento de las aves, sino que también mejoran la calidad del producto final.
Las enzimas desempeñan un papel vital al mejorar la disponibilidad y absorción de nutrientes, garantizando que las aves reciban los elementos esenciales para su desarrollo. Por otro lado, los minerales orgánicos son fundamentales para la formación y el cuidado de los huesos, así como para la salud muscular de las aves. Esta atención a la nutrición contribuye directamente a la calidad y sabor inigualables del pavo, consolidando su posición en las mesas festivas.
La preparación de la industria química durante todo el año, como señaló Remolina, refleja un compromiso con la producción avícola. La prioridad en la calidad no solo beneficia a la salud de los consumidores, sino que también asegura una experiencia culinaria satisfactoria durante las festividades. Con esta combinación de esfuerzos y enfoque en la nutrición animal, Ecuador logra mantener su autonomía en la producción y consumo de pavos, destacándose en la escena internacional por la calidad de sus productos avícolas.
