Para este martes, los productores anunciaron una intensificación de los bloqueos, especialmente en tres puntos del Cesar: Aguachica, San Martín y San Alberto. Allí, los arroceros anunciaron que bloquearán totalmente las vías, permitiendo la movilización exclusiva por el corredor humanitario.
La intensificación de la protesta también cubrirá algunos puntos de Norte de Santander. Así mismo, hasta el lunes, se registraban algunos bloqueos en Meta, Huila y Tolima (tres departamentos con importantes producciones arroceras, de paso).
De acuerdo con los productores, “esta decisión se toma luego de que el presidente Gustavo Petro no asistiera a la reunión programada con los arroceros, lo que ha generado mayor inconformidad entre los productores, quienes exigen soluciones urgentes a la crisis del sector”.
Las conversaciones entre arroceros y Gobierno continuaron hasta la noche de este lunes en la mesa de negociación establecida en el municipio tolimense de El Espinal, en donde, según el Ministerio de Agricultura, se estaban discutiendo asuntos alrededor de temas como “del diferencial en el precio, agrologística para la cadena, opciones de financiamiento con beneficios para las y los productores, participación real y efectiva en compras públicas locales y opciones favorables de maquila”.
Fuentes del lado de los arroceros aseguraron que el Gobierno presentó unos puntos adicionales en la mesa, pero “creo que esto se va a tomar tiempo”, según uno de los participantes de la mesa.
¿Cuáles son los reclamos de los arroceros?
De fondo, los arroceros piden mejores condiciones y apoyo para estabilizar los precios de su producto, que, dicen los cultivadores, les está dejando pérdidas de entre $1 y $2 millones por hectárea sembrada.
De acuerdo con los arroceros, la volatilidad en el precio se debe, especialmente, a la falta de distritos de riego y a la desaparición del incentivo de almacenamiento, con el cual se controlaba el excedente de las cosechas, a la vez que se garantizaba un precio más estable para los agricultores.
Dicho mecanismo ofrecía un apoyo financiero para guardar el arroz y no tener toda la cosecha en circulación. Sin embargo, este fue eliminado por el Gobierno el año pasado, dándole el mayor golpe al sector, de acuerdo con Fedearroz.
“La filosofía del incentivo de almacenamiento era pagarle al industrial para que guarde el arroz con el compromiso de pagarle determinado precio a los productores (…). Hoy estamos viviendo las consecuencias de que no haya un mecanismo que regulara la oferta y se pudiera guardar arroz”, afirmó en entrevista con este diario Rafael Hernández Lozano, gerente de Fedearroz.
En Colombia, cerca del 70 % del arroz se cultiva bajo el sistema de secano, es decir, sin riego artificial. Mientras que el 30 % de los cultivos cuentan con sistemas de riego.
Desde julio, los precios han ido bajando y en diciembre terminaron de caer, golpeando a los productores. Y a esto se le sumó la salida de una parte de la cosecha de Tolima y Huila, entre febrero y marzo.
Si se mira este tema desde el punto de vista de la la producción, el país cultivó más de 600.000 hectáreas de arroz en 2023. Sin embargo, gremios del sector consideran que una cifra más equilibrada para evitar grandes excedentes debería ser de 550.000 hectáreas.
¿Qué dice el Gobierno sobre el paro arrocero?
Al finalizar un encuentro de alto nivel en la noche del lunes, César Pachón, presidente de la Agencia de Desarrollo Rural, aseguró que se está trabajando en mejorar las capacidades de los arroceros, así como buscar la posibilidad de exportar hacia mercados como México y Venezuela.
“El principal cuello de botella es el mercadeo agropecuario. En el sector arrocero hoy tenemos un oligopolio que viene poniendo los precios del arroz sin tener en cuenta los costos de producción y un margen de rentabilidad”.
Y agregó: “Estamos creando una alianza con varias cooperativas de productores de arroz en la que se les dan las condiciones para que ellos adquieran la capacidad molinera, en secadoras, de almacenamiento. Y se presenta al mercado de compras públicas como priorizado para acompañar un proceso de pago justo”.
Desde el Gobierno también se ha propuesto, mediante créditos asociativos, apuntarle al crecimiento en la infraestructura de almacenamiento, secado y trillado, especialmente para pequeños y medianos productores. “Necesitamos tener un ordenamiento productivo. No podemos ampliar áreas sembradas si no tenemos capacidad de almacenamiento”, dijo en su momento Martha Carvajalino, ministra de Agricultura.
Entre las propuestas del Ministerio para solucionar el paro se cuentan asuntos como:
Línea Especial de Crédito (LEC) de reactivación agropecuaria: otorga subsidio a la tasa de interés de 4 % para pequeños productores, y de 5 % para medianos. Para esta iniciativa hay una disponibilidad de hasta $4.000 millones que apalancarán créditos por $56 mil millones.