Podemos ampliar la temporada gracias a que ofrecemos diferentes variedades en diversas ventanas de cosecha. Este año, hemos empezado con una producción de 15 hectáreas de ajo blanco, a 150 kilómetros de Arequipa. Esperamos cosecharlas en septiembre, para empezar a enviarlas en octubre”, explica Gregory Vickers, de White Lion Foods, en Perú.
“Normalmente exportamos a México, Brasil y Francia. Estos países están familiarizados con los ajos de color y acostumbrados a trabajar con ellos. Es difícil competir con China, lo que también es una razón importante para tener a México y Brasil como nuestros principales mercados de exportación. El ajo de China no está permitido en México y Brasil aplica tipos impositivos muy altos. Todo eso hace que estos mercados sean interesantes para el ajo peruano”, añade Vickers.
Vickers es optimista sobre la temporada que viene. “Estamos en una buena ventana con nuestro ajo morado. Por ejemplo, el año pasado, la competencia (por ejemplo, Chile y Argentina) entró en el mercado cuando ya habíamos exportado casi todos nuestros productos. Cuando estábamos exportando, solo México estaba en el mercado”. Exportar a España será difícil, aunque ya ha recibido algunos pedidos. “España tiene poca cosecha actualmente y también exporta a EE. UU., lo que se traduce en menos ajo para su mercado local”.