Durante el proceso de extrusión seca de alta fricción, ocurren muchos eventos a la vez. La fricción y presión intensas procesan de manera mecánica el producto para mejorar varias de sus características. La extrusora tiene muchos fines, entre los cuales está la deshidratación. Es gracias a este fenómeno que se desactivan los factores antinutricionales, como en el caso del procesamiento de la soya. Sin embargo, una pregunta que viene a la mente es: ¿por qué ocurre esto?

La extrusora seca de alta fricción es una máquina única. El procesamiento térmico se produce solo con la fricción. Dentro de la extrusora, el producto se somete a condiciones extremas, pero solo por un período muy corto. Esta corta duración mantiene una alta disponibilidad de los nutrientes. Dentro de este período de retención, el producto no solo se somete a una fricción extrema, sino también a presiones intensas. Mediante el uso de transductores de presión, hemos podido medir esta presión para que sea varias veces superior a la presión atmosférica. Esta compresión aumenta a medida que el producto se desplaza por el cañón, hasta que finalmente llega al extremo de descarga y sale por la ojiva. En esta interfaz es donde la física queda a cargo y se produce un proceso realmente único.

Se sabe que el agua hierve a los 100 °C (212 °F) en condiciones atmosféricas normales (es decir, la presión de aire normal que experimentamos a diario). Cuando el agua se somete a alta presión, aumenta la temperatura a la que esta hierve. También ocurre lo opuesto. Esto explica por qué el agua hierve a una temperatura más baja a mayor altura, dado que la presión atmosférica es inferior. Como se mencionó, el ambiente dentro del cañón de la extrusora está bajo una intensa presión. La ojiva es la barrera donde el producto extruido pasa de estar bajo una intensa presión a la presión normal de la atmósfera. La ojiva descarga en condiciones atmosféricas, lo cual implica una reducción masiva de la presión. De forma similar a lo que los buzos experimentan al sumergirse a profundidades extremas (y el motivo por el que deben emerger lentamente a la superficie, para evitar la enfermedad por descompresión), el producto extruido experimenta un fenómeno parecido a nivel celular. Esta reducción masiva de la presión hace que las estructuras celulares exploten y determinados aspectos estén más biodisponibles. Al mismo tiempo, el agua bajo extrema presión se libera del producto, básicamente al “hervir”, que es lo que se ve en forma de vapor.

La extrusora seca de alta fricción es un equipo único en su tipo. La deshidratación es solo uno de los tantos beneficios del procesamiento en este tipo de extrusora. Aprovechar esta y otras características exclusivas mejorará los productos que desee procesar.

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