Jugadores de las selecciones femenina y masculina de básquet 3x3 de Ecuador en los Juegos Bolivarianos de Valledupar, en julio de 2022. - Foto: Comité Olímpico Ecuatoriano

Las selecciones femenina y masculina ecuatorianas han conseguido importantes triunfos internacionales en esta disciplina, que es relativamente nueva alrededor del mundo, pero que ya es parte de los Juegos Olímpicos.

En solo tres meses, el básquetbol 3×3 ecuatoriano obtuvo tres medallas a nivel continental. La primera fue en los Juegos Suramericanos de la Juventud, en mayo de 2022, donde la selección femenina se consagró subcampeona.

Después, en los Juegos Bolivarianos de Valledupar en julio, tanto el equipo femenino como el masculino ganaron medallas de plata.

“Para los Bolivarianos sabíamos que íbamos a buscar una medalla, algo menos que eso iba a ser una decepción para nosotros”, afirma Alexander Guerra, jugador de la Selección.

Son logros sorprendentes para una disciplina que ha pasado desapercibida y que cuenta con poco apoyo, pero que tiene mucha proyección en nuestro país.

Son prácticamente 10 años de trabajo del básquet 3×3 en el Ecuador y los frutos ya se están cosechando. El objetivo máximo es que las selecciones de mujeres y de hombres se clasifiquen a los Juegos Olímpicos de París 2024.

La selección masculina de básquet 3×3 de Ecuador, en los Juegos Bolivarianos de Valledupar, el 4 de julio de 2022. Comité Olímpico Ecuatoriano

Una década de esfuerzos

Si bien el básquet 3×3 se ha jugado durante varios años como un pasatiempo en los colegios, parques y universidades, la disciplina comenzó a desarrollarse competitivamente en el país desde 2012.

Andrés Espinoza, director técnico de la selección masculina, explica que desde ese año se desarrolló a los jugadores y equipos con el objetivo de clasificar a un Mundial.

Ecuador jugó en tours de la región desde 2012. Las buenas actuaciones en 2016 y 2017 aseguraron un cupo para el Mundial de 2018, en Filipinas, pero la falta de recursos no permitió que el equipo viaje y compita.

A pesar de esta desazón, el objetivo siguió en marcha y, en 2022, la selección se unió a Proyecto B, una empresa deportiva que está desarrollando las categorías Sub 13, 15, 17 y 19.

“Los ganadores de estas formativas podrán disputar el tour latinoamericano en Miami, donde estarán veedores de Estados Unidos y tendrán la oportunidad de jugar en el exterior “, comenta Espinoza.

A estos esfuerzos también se suman los diferentes torneos de 3×3 que ha impulsado la Federación Ecuatoriana de Básquet durante el último año y que han permitido descubrir jóvenes talentos alrededor del país.

 “Estas competencias nos hicieron bastante bien, nos permitieron desarrollar nuestra técnica y adaptarnos al formato del 3×3?, dice Dayanna Salcedo, jugadora de la selección femenina.

La selección femenina de básquet 3×3, con sus medallas de plata de los Juegos Suramericanos de la Juventud, en Argentina, el 1 de mayo de 2022. Comité Olímpico Ecuatoriano

Diferencias entre el 3×3 y el 5×5

Las dos principales diferencias entre el básquet 3×3 y el regular (también conocido como 5×5) tienen que ver con la cancha y el número de jugadores.

En el 3×3, como bien lo dice el nombre, se forman equipos de apenas tres jugadores. Estos compiten en un solo lado de la cancha y ambos buscan anotar en el mismo aro.

Es una disciplina mucho más dinámica, que solo permite 12 segundos para intentar un lanzamiento y que se juega en un único período de 10 minutos.

“La técnica es la misma (en comparación con el 5×5), pero la preparación física y táctica es diferente. Es un deporte más intenso y debemos practicar jugadas súper cortitas”

Dayanna Salcedo, jugadora de la selección ecuatoriana

El entrenador de la selección femenina, Patricio Ponce, agrega que también es más desafiante mentalmente “porque las acciones son muy rápidas y las jugadoras deben tener una mejor toma de decisiones “.

Por su parte, Andrés Espinoza define al 3×3 como ‘una carnicería‘. “Es de muchísimo contacto. Se necesita de una condición muscular bien adaptada. Aunque son solo 10 minutos, dentro de la cancha se sienten como una eternidad”.

Mucha proyección, pero poco apoyo

Un beneficio del básquet 3×3 es que las selecciones solo están formadas de cuatro jugadores, por lo que se necesita de un menor presupuesto para transportar a los equipos.

Esto fue lo que pasó para los Juegos Bolivarianos: no hubo recursos para llevar a equipos 5×5, pero se decidió llevar en su lugar a dos selecciones 3×3, según confirmó Patricio Ponce.

Otro beneficio, según cuenta el entrenador de las damas, es que es que es un deporte más fácil de masificar, ya que solo se necesitan seis personas para comenzar un partido y en una cancha se pueden jugar dos encuentros al mismo tiempo.

Sin embargo, a pesar de estas facilidades y la gran proyección que muestran los jugadores, ha sido complicado desarrollar a las selecciones.

“Necesitamos de apoyo económico para formar a los chicos. El objetivo es tener a tres equipos al mismo tiempo y poder llevarlos a concentraciones y microciclos”

Andrés Espinoza, DT de la selección ecuatoriana

Por ejemplo, la selección masculina, después de su medalla de plata en Valledupar, fue invitada a un torneo en Río de Janeiro, pero no pudo ir por falta de presupuesto.

“En cambio la selección de Chile, a la cual derrotamos en los Bolivarianos, sí pudo ir. Esto es negativo para nosotros porque los demás países siguien sumando puntos en el ranking y nosotros no”, dice el director técnico.

 

A pesar de estos inconvenientes, hay optimismo en el equipo para el futuro. “Creo que las empresas privadas nos están abriendo más las puertas. El básquet se está transmitiendo cada vez más en el Ecuador, así que ha habido mayor interés”, opina Alexander Guerra.

El próximo objetivo para ambas selecciones son los Juegos Suramericanos en Asunción, Paraguay, del 1 al 15 de octubre.

Además, en los próximos meses entrenarán en microciclos y disputarán torneos de preparación, a los que Ecuador ha sido invitado por su excelente nivel.

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