- Un estudio a largo plazo realizado en el Cerrado mostró que los sistemas integrados de cultivos y ganado (ILI) reducen la cantidad de fertilizantes a aplicar.
- Al reducir la aplicación de fertilizantes, el sistema de ILP sigue reduciendo las emisiones de óxido nitroso, un importante gas de efecto invernadero.
- Además de la ventaja económica para el productor, al gastar menos en fertilizantes, la rotación entre cultivos y pastos mejora la calidad del suelo.
-
Un estudio realizado por Embrapa en el Bioma del Cerrado muestra que la adopción de sistemas integrados puede ser beneficiosa tanto en la reducción de las emisiones de óxido nitroso (N 2 O) como en la reducción de las aplicaciones de fósforo y potasio, en comparación con los sistemas de cultivos continuos fecundados con las dosis normalmente recomendadas de estos nutrientes.
Los sistemas continuos de labranza, sin presencia de pastos en rotación y a base de un solo cultivo de soja y sorgo, por ejemplo, promovieron mayores emisiones de N 2 O cuando se aplicó la fertilización recomendada en relación con los sistemas que recibieron la mitad de la dosis, aplicado como fecundación de mantenimiento, según los resultados obtenidos en un experimento a largo plazo realizado en Embrapa Cerrados (DF) entre 1991 y 2013. El pastoreo en el área del sistema LSI en los años previos al estudio y el estiérco con la mitad de las dosis de fósforo y potasio redujeron las emisiones acumuladas de gases de efecto invernadero (GEI) en un 59%. Para los autores del estudio, ante la crisis global de los fertilizantes, los resultados son extremadamente relevantes para la agricultura en Brasil y en el mundo.
Los resultados de la investigación se publican en el artículo Nitrous Oxide Emissions de un Sistema Integrado de Cultivo de Carga a Largo Plazo con Dos Niveles de Fertilización de P y K, que cuenta entre los autores de Embrapa Cerminrados Arminda Moreda de Carvalho, Alexsandra Duarte de Oliveira y Robélio Leandro Marcho, quienes trabajaron en asociación con la Universidad de Brasilia.
La relación entre las emisiones N2 y la fertilización con nitrógeno, así como las menores emisiones de N2 O resultantes de la adopción de sistemas integrados, ya están bien documentadas en la literatura científica.22 Sin embargo, todavía no había información disponible sobre la relación entre las emisiones de estos GEI y otros nutrientes comúnmente aplicados al cultivo, como el fósforo y el potasio, argumentan los autores.
El trabajo partía de la premisa de que los sistemas integrados son más eficientes en el uso de nutrientes aplicados al suelo, y que en suelos de fertilidad construida (después de varios años de cultivo) es posible reducir significativamente las dosis de fósforo y potasio aplicados en la fase de cultivo de rotación. Según los investigadores, la rotación entre cultivos y pastos aporta varios beneficios para la calidad del suelo, lo que resulta en la protección de la materia orgánica y la mejora del funcionamiento del suelo biológico, además de reducir las emisiones de GEI.
En el sistema integrado en la modalidad de buey de “asfixiado”, por ejemplo, el pastoreo fuera de temporada reduce la disponibilidad de biomasa en el suelo, aumentando la mineralización del nitrógeno, el ciclo de nutrientes y estimulando el sistema radial de la hierba forrajera. Confirmamos la hipótesis de que con la adopción de sistemas integrados en áreas consolidadas de la agricultura es posible reducir la fertilización con fosfato y potasio y, al mismo tiempo, mitigar las emisiones de N2 O en comparación con los cultivos continuos que reciben altas dosis de estos nutrientes, dice Marcho.2
Nuestros resultados sugieren que los sistemas integrados, que incluyen cultivos y pastos, y con la mitad de la dosis de P y K, son más eficaces para mitigar las emisiones de N2 O, que, en el contexto actual de la crisis climática y en la industria global de fertilizantes, es un aspecto de gran relevancia para la agricultura en Brasil y en el mundo, concluyen los autores.2
Tecnología importante para el cambio climático
Los sistemas integrados ya son una realidad en Brasil y representan una de las tecnologías disponibles para enfrentar el cambio climático, siendo una de las principales estrategias previstas en el Plan ABC, la actual política pública brasileña para mitigar las emisiones de GEI en el sector agrícola. La expectativa es que la aplicación de políticas públicas de pago por servicios ambientales y la posibilidad de negociar el excedente de carbono en el mercado público o privado hagan aún más atractiva la adopción de sistemas integrados.
Para ello, es necesario establecer métricas que nos permitan comparar sistemas tradicionales, como cultivos continuos de granos, o ganado, con los intensificados, como la Integración Intensiva de Culpa-Balance y el Bosque de Integración de Culpa-Piso. En este sentido, nuestro estudio contribuye a la elaboración de estas métricas, concluyen los autores.
Alineación con los ODS
El estudio está alineado con algunas metas de tres de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) recomendados por las Naciones Unidas (ONU).
Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y mejorar la nutrición y promover una agricultura sostenible.
Meta 2.4: Para 2030, garantizar sistemas sostenibles de producción de alimentos e implementar prácticas agrícolas resilientes que aumenten la productividad y la producción, ayuden a mantener los ecosistemas, fortalezcan la adaptabilidad al cambio climático, las condiciones climáticas extremas, las sequías, las inundaciones y otros desastres, y mejoren progresivamente la calidad de la tierra y el suelo.
Objetivo 12: Garantizar modalidades de producción y consumo sostenibles.
Meta 12.2: Para 2030, lograr una gestión sostenible y un uso eficiente de los recursos naturales.
Objetivo 13: Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
Meta 13.1: Fortalecer la resiliencia y la adaptabilidad a los riesgos relacionados con el clima y los desastres naturales en todos los países.
el Breno Lobato (MTb 9417/MG)
Embrapa CerradoContactos para la prensa
cerrados.imprensa-embrapa.br
Teléfono: Teléfono: (61) 3388-9945U
INFORME TÉCNICO: La integración de la gramilla limpia puede reducir el uso de fertilizantes y mitigar los impactos climáticos
