El 2025 comienza con grandes expectativas para los agricultores y ganaderos del cantón Tosagua, en la provincia de Manabí, quienes esperan un invierno productivo que permita recuperar parte de la estabilidad económica de la zona rural. Sin embargo, esta esperanza se ve empañada por la falta de acceso a créditos para financiar la siembra de sus cultivos, en especial el maíz, uno de los productos más representativos de la región.
Antonio Delgado, representante de la Red de Agricultores del Cantón Tosagua, destacó la importancia de la actividad agrícola para la economía local y nacional, señalando que “si al campo le va bien, a la ciudad también”. No obstante, las dificultades económicas son evidentes. Los agricultores enfrentan altos costos de producción, que en algunos casos superan el valor de la cosecha obtenida, y carecen de recursos suficientes para invertir en nuevas siembras. A pesar de tener los suelos listos y esperando las lluvias para iniciar la siembra de maíz, los productores se encuentran limitados por la falta de financiamiento.
El crédito agrícola ha sido uno de los temas más críticos para el sector. Según Delgado los agricultores han tenido que recurrir a la banca privada, cuyos intereses alcanzan hasta el 25-26%, un porcentaje elevado que dificulta aún más su recuperación económica. BanEcuador que históricamente ha sido una opción para los agricultores, no ha proporcionado los créditos necesarios, dejando a los productores en una situación precaria. En este contexto, Delgado hizo un llamado al gobierno para que se ofrezcan líneas de crédito accesibles con tasas de interés bajas, de no más del 8-9%, para los pequeños y medianos agricultores.
Además, la eliminación del subsidio para los fertilizantes, como la urea, que antes se podía adquirir a un precio más bajo, ha incrementado aún más los costos de producción. En 2024, los agricultores tuvieron que comprar urea a 30 dólares el saco, un precio muy superior al anterior, lo que impactó negativamente en la rentabilidad de sus cultivos.
A pesar de estas dificultades, la esperanza persiste entre los agricultores de Tosagua, quienes, a pesar de los desafíos, siguen trabajando con sus propios recursos en espera de un año más productivo. Sin embargo, la falta de apoyo gubernamental y de políticas públicas que favorezcan el sector agrícola sigue siendo una preocupación constante, según el maicero.
La Red de Agricultores del Cantón Tosagua ha estado exigiendo medidas urgentes para mejorar las condiciones del campo, entre ellas, la reactivación de programas de crédito accesibles y el apoyo en la compra de insumos esenciales.
La situación es alarmante, ya que la falta de soluciones podría llevar a una crisis en la producción agrícola nacional, especialmente en cultivos clave como el maíz. Por ello, los agricultores de Tosagua, en conjunto con otros dirigentes de provincias como Los Ríos, Orellana y Esmeraldas, continúan luchando para que el gobierno ponga la mirada en el campo y garantice un futuro más prometedor para los productores rurales del país, a la espera de que el nuevo gobierno se comprometa con el agro, culminó Delgado.