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Crear un sistema de riego eficiente para su espacio de invernadero es ahora más importante que nunca para los cultivadores comerciales en la industria hortícola. Los principios de diseño inteligentes sobre el riego de invernadero no sólo pueden ser responsables y rentables a corto plazo optimizando la distribución del agua, sino un buen plan a largo plazo al contabilizar la escasez de agua y la implementación de la automatización para ahorrar en costos laborales y mantenerse por delante de la curva.
Veamos las mejores maneras de diseñar su sistema de riego de invernaderos para proporcionar condiciones óptimas de crecimiento, maximizar la calidad y la cantidad de rendimiento, minimizar los residuos de recursos y cultivar el éxito mediante la contabilidad de todas las variables posibles.
1. Cuánta agua necesita mis plantas?
La primera pregunta a la hora de diseñar u optimizar los sistemas de riego de invernaderos es las necesidades exactas de sus plantas. Usted querrá saber cuánta agua requieren sus plantas, así como el calendario de distribución para la correcta gestión del agua. Puede haber muchos datos para ordenar para encontrar la mejor respuesta. Esto significa considerar la especie vegetal, su ciclo de desarrollo y la etapa actual de crecimiento, y las condiciones ambientales del invernadero.
Además, durante este proceso de investigación, se recomienda desarrollar un Procedimiento Operativo Estándar (SOP) para cada planta en su invernadero, según LLK Greenhouse Solutions. Esto ayudará a optimizar otras áreas del proceso de cultivo más allá del sistema de riego.
2. Es mi calidad de agua lo suficientemente buena?
Las plantas pueden sufrir mucho si se les proporciona agua de mala calidad. Es importante saber que puedes confiar en la fuente del agua utilizada para tu sistema de riego de invernaderos. Eso significa que debe probarse regularmente en busca de productos químicos, partículas, patógenos y otras áreas de interés (equilibrado lpH, conductividad eléctrica, etc.) para asegurarse de que se filtra correctamente y no tóxico. De esta manera, no representará daño a sus plantas y su rendimiento, así como al propio sistema de riego sobre las probabilidades de obstrucción y corrosión.
3. Cómo puedo integrar las nuevas tecnologías de riego?
Especialmente para los cultivadores comerciales que operan a gran escala, la tecnología de automatización es una herramienta importante para gestionar el tiempo, la mano de obra, los recursos, el costo y más. Esto incluye la automatización dentro de un sistema de riego de invernaderos y su diseño.
Además de la automatización, también es importante mantenerse al día con otras tecnologías de vanguardia e incorporarlas cuando sea útil, ya sea práctico (riganza de precisión) o basada en datos (análisis)
4. Cómo puedo hacer mi sistema de riego más sostenible?
La sostenibilidad es un aspecto crítico de todas las operaciones de invernadero. Para el diseño de riego, eso implica la conversación de agua, la gestión de los recursos y la gestión de posibles impactos ambientales.
Si se generan residuos durante las operaciones del sistema, se debe analizar si estos materiales pueden reciclarse o reutilizarse o reutilizarse, como en los casos de escorrta y condensación.
Además, deberían explorarse otras vías de energía renovable, incluida la energía eólica y solar. Esto puede ayudar aún más a minimizar la huella de carbono de una operación de invernadero, así como a producir ahorros de energía a largo plazo después de recuperar el costo de compra e instalación. Para obtener más información sobre las opciones de energía renovable, consulte la guía de Calentión de Greenhouse de Greenhouse Management.
5. Cómo puedo auditar y evaluar adecuadamente mi sistema para una mayor mejora?
Por último, siempre es importante mirar el presente y averiguar qué podría hacer mejor en el futuro. Encontrar el éxito en cualquier industria depende de adaptarse a los cambios, y la naturaleza de las operaciones de invernadero es un proceso en constante evolución.
Por lo tanto, es importante comprometerse con auditorías regulares de los sistemas y controles de rendimiento, e incorporar el uso de análisis de datos. La realización de estas prácticas no sólo identificará las áreas de mejora para capitalizar, sino que también detectará cualquier irregularidad en el sistema que necesite reparaciones o actualizaciones.
