El sector requiere volver a florecer. La crisis económica de Rusia, que empezó a finales de 2014, desencadenó varios inconvenientes para los exportadores de flores, con la consecuencia de que se ha disminuido la tierra dedicada para ese cultivo, unas 550 hectáreas menos en dos años.

Hasta el 2014 estaban cultivadas 4.500 hectáreas ahora hay alrededor de 3.950. Así lo indicó a Diario EXPRESO Alejandro Martínez, presidente ejecutivo de Expoflores.

Explicó que Rusia es uno de los principales compradores de las flores ecuatorianas y pasó de comprar 35,9 millones de dólares en 2014 a adquirir al año siguiente solo 18 millones de dólares. En este año, del mismo mes, solo 13, 8 millones de dólares. “Son valores importantes en la caída que ha estremecido al sector”, dijo.

Pero el efecto adverso fue doble, por un lado se dio una sobreproducción sin poder vender y por otro, los precios se empujaron a la baja.

Martínez resaltó que lo más difícil fue manejar un precio caído de la flor en el mercado internacional, y un costo alto de producción. La consecuencia se ve en la disminución de las hectáreas cultivadas, el año pasado se dejó de cultivar 350 hectáreas de flores y lo que va del año, unas 200 hectáreas más.

“Y todo por las bajas o nada de ganancias que quedaba”. Dependiendo el tipo de flores varía el precio de la producción de una hectárea.

Pero, en promedio, el costo es entre 160.000 y 300.000 dólares. Ahora, esas mismas hectáreas vendidas al exterior generan entre 160.000 a 200.000 dólares, entonces hay pérdidas que no todos los productores lograron resistir.

¿Qué encarece el costo de producción?

“Por un lado la mano de obra que es más cara ahora y los precios de insumos, servicios y transporte que en Ecuador son más caros”.

En este año tuvieron una caída no muy grande en las exportaciones generales, hasta agosto el descenso en tonelada es de 3,2 %. Donde más se siente la baja es en el dinero recibido, hasta agosto es de -5 % y esto porque el precio del producto también está en cifra negativa de 1,8 %, según el Banco Central del Ecuador (BCE).

En cuanto a las proyecciones para el 2017 el líder del gremio considera que será un año de transición, aspira a que no se reduzcan más hectáreas cultivadas de flores. Están tranquilos con las exportaciones a Estados Unidos, porque se renovaron los certificados de participación para ese mercado.

Desde ya se preparan para la venta de flores en San Valentín del próximo año. Se puede decir que en Navidad los floricultores viven el 14 de febrero, la venta empieza en la segunda semana de enero del nuevo año. La meta es que el sector vuelva a florecer en ingresos.

 

Fuente: Expreso | ElProductor.com

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