Foro internet / Redacción: Marlene Bernal

EL año 2020 estuvo bien marcado en los dos semestres, según Juan Pablo Zúñiga, presidente de la Corporación de Industriales Arroceros del Ecuador (Corpcom).

El primero estuvo marcado por la pandemia en el cual hubo incremento de consumo y que por sus costos era fácil adquirir, “el sector arrocero fue uno de los que nunca se paralizo, nunca se desabasteció, en toda la cadena, lo cual facilito que en mayo y junio se hicieran exportaciones a Colombia lo cual hizo que los precios tuvieran un repunte y fue un incentivo para que los productores siguieran sembrando” expresó.

Según el directivo, en el segundo semestre con un escenario semejante al del 2018, en el cual hubo sobre oferta de arroz, sin demanda del mercado colombiano, esperábamos colocar un contingente de 50.000 ton que no se ha podido colocar ni un 10% del volumen, cerramos el año con grandes inventarios que están prácticamente en mano de los industriales, esto nos va a acarrear a tener un gran excedente con miras a la cosecha invierno 2021, argumentó.

“Esto nos está llevando a los agro exportadores a buscar mercados en el exterior y no depender del mercado colombiano que cuando ese país decide no adquirir productos ecuatorianos nos causa este desbalance y se ve reflejado en los precios. Y que las autoridades vean que no es un tema orquestado por parte del sector industrial, sino es un asunto oferta y demanda” acoto.

Para el empresario lo más importante en este momento es   ser más productivos, trabajar con buenas semillas de alto rendimiento, insumos a menor costo, y de esta manera tener costos más bajos para lograr mejores precios para competir con los mercados internacionales.

Exportaciones de arroz ecuatoriano a Colombia, afectadas por la devaluación

Las exportaciones de arroz a Colombia en el mes de diciembre no fueron las esperadas, manifestó a este medio Javier Chon, Gerente de Arroz Imperial, quien explicó que esto se debe la devaluación del peso colombiano frente al dólar que encareció el producto para el país vecino.

“Por motivo de la pandemia se deterioró el peso y volvió muy caro nuestro producto” al tiempo que agregó que durante este año unas 40.000 toneladas de la gramínea fueron exportadas al vecino país.

A pesar del panorama, Chon manifestó que guarda esperanzas de que la situación mejore a partir de enero del 2021, pues augura que los precios en Ecuador se mantendrán y también se ve una leve recuperación de la moneda colombiana, por lo que considera que eso genera una buena motivación a la compra.

Esperamos durante 2021 en el periodo de enero a junio tener la salida de exportación de arroz ecuatoriano, tendremos además un excedente aproximado de 120.000 toneladas que es un volumen normal para evitar la especulación de precios” dijo.

Sobre las expectativas de la venidera cosecha de invierno, dijo que dependerá de que como avance el temporal en la medida que el invierno avance normal, podríamos tener un escenario en la época de cosecha de precios aproximados entre los $34 y $36 que es lo que normalmente oscila.

Los silos de Daule que eran de la Una deberían servir en este momento para almacenar arroz

Javier Ronquillo, presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos los Caídos de Santa Lucia, en Guayas, reconfirmo lo dicho anteriormente al hacer el análisis donde los primeros 8 meses del 2020 fue un buen momento para el sector arrocero ya que lograron una buena producción a buenos precios.  Pero a partir de octubre o noviembre, dice el productor, empezaron a bajar los precios por la cantidad de arroz que hubo en siembras en el momento que pudieron trabajar con todas las seguridades, donde llegaron a cosechar 7 ton por hectárea en el sector, lo cual aumento la producción y no hubo salida a Colombia. “Por este motivo quedo todo el arroz y en los últimos meses hubo sobre producción que bajo los precios.  La saca de 210 está a 25 dólares grano largo y estamos en cosecha de soca porque la gente empezó en julio a sembrar.” Argumenta el arrocero.

Según Ronquillo en esta dura época se pudo apreciar que sin trabajo en el campo no hay alimentación,” el sector no paro, nos cuidamos, pero no paramos, la producción ha sido muy buena pero los precios bajaron porque no hay exportación y el mercado interno se satura porque no tenemos grandes piladoras para almacenar, estamos buscando lugares donde poder secar, quien no puede, tiene que venderlo a cualquier precio. Tenemos en Daule un silo sin hacer nada (que era de la Una) cuando los agricultores lo necesitamos. Ellos podrían ayudar alquilándonos o buscar una alternativa para que los podamos usar ya que no están haciendo nada sin servicio” destacó el productor.

Finalmente, el arrocero espera que para el 2021, cambie el gobierno y realmente les den créditos cómodos, “con dinero podemos seguir trabajando” acoto.

Fuente: El Productor / www.elproductor.com

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